En la tercera parte de la serie “Transformación digital en la educación” vamos a hablar sobre la educación basada en competencias (EBC) en el mundo corporativo.
El informe del Foro Económico Mundial titulado “The Future of Jobs” muestra que la cuarta Revolución Industrial va a seguir transformando los modelos empresariales y que se espera que los trabajadores cuenten con nuevas habilidades. A su vez, estas habilidades cambian rápidamente, al mismo ritmo al que se producen los cambios en la industria. De acuerdo con el informe, el avance de los procesos de automatización significa que los puestos de trabajo van a cambiar: muchos van a desparecer, otros se transformarán y otros nuevos surgirán.
Además, según el informe, para 2022, algunas de las habilidades que más se requerirán de los trabajadores estarán relacionadas con el pensamiento crítico, la inteligencia emocional, la programación de tecnología, la capacidad de resolución de problemas complejos, la creatividad, la originalidad y la iniciativa. Asimismo, algunas de las habilidades que cada vez tendrán menos demanda serán las relacionadas con destreza manual, control de calidad, memoria, coordinación y manejo de personal. El informe también señala que hasta 2022 los trabajadores van a necesitar un promedio de 101 días adicionales de capacitaciones y aprendizaje.
En vista del futuro, lo positivo es que hay una idea general compartida de que el trabajo de recualificación que será necesario para acompañar los cambios en el mundo es una responsabilidad de todos, tanto de los propios trabajadores, que deberán estar atentos a las oportunidades que se presenten, como de los líderes del sector público-privado. El informe plantea la problemática de la pérdida de puestos de trabajo, pero también muestra que parte de la solución está, en gran medida, en la adquisición de nuevas habilidades y posibles oportunidades de estrategias coordinadas de transición laboral entre distintos sectores.
Por eso, para ser competitivas, las organizaciones van a necesitar capacitar a sus trabajadores. La educación basada en competencias puede ser una gran aliada en este proceso, ya que es una metodología que se puede adaptar a los cambios constantes esperados de los trabajadores. Estos son algunos ejemplos de escenarios en los que puede ser necesario adquirir nuevas competencias:
- Una organización compra a otra, y los trabajadores tienen que aprender nuevas orientaciones estratégicas para adaptarse a la nueva realidad.
- Una nueva tecnología aparece en el mercado. Por ejemplo, los trabajadores deben saber utilizar las nuevas aplicaciones online que se convirtieron en grandes puntos de venta para los negocios.
- Los puestos dentro de una misma organización cambian. En estas situaciones la recualificación es fundamental tanto para el desarrollo del trabajador como para la organización.
Además, el hecho de que la organización ofrezca capacitaciones demuestra que valora y confía en sus trabajadores. Eso, en un contexto organizacional saludable, genera bienestar y sensación de propósito. La EBC es la metodología que permite poner énfasis en la adquisición de esas competencias. Educar por competencias significa tomar el conjunto de competencias necesarias para la excelencia de desempeño en la organización y enfocar las capacitaciones en estas competencias.
Si quiere saber más sobre la EBC y cómo implementarla, haga clic aquí.
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